Estas son las claves para ser más productivo trabajando en un coworking
En un mundo donde el teletrabajo cada vez es más común, los espacios coworking han surgido como una solución para quienes buscan flexibilidad sin perder productividad. Trabajar en un coworking no es solo compartir un escritorio con más coworkers, sino sacarle el máximo partido a un entorno diseñado específicamente para potenciar la concentración, la creatividad y la colaboración.
Estos espacios permiten que profesionales de distintos sectores compartan conocimientos, se inspiren mutuamente y establezcan conexiones valiosas. Pero, para que la experiencia sea efectiva, es fundamental una buena organización y tener muy claros tus objetivos.
Si quieres que tu paso por un coworking impulse tu rendimiento y te ayude a sacar lo mejor de ti, sigue estos consejos y descubre cómo mejorar tu productividad mientras disfrutas de todas las ventajas de un espacio de trabajo colaborativo.
Elige el espacio adecuado dentro del coworking
Un coworking ofrece distintas zonas de trabajo: áreas comunes, espacios privados y salas de reuniones. Si necesitas máxima concentración, es mejor elegir un lugar con menos tránsito. Las áreas privadas y salas de reuniones son ideales para quienes necesitan silencio para concentrarse, hacer llamadas o llevar a cabo reuniones con clientes sin interrupciones. Pero si tu objetivo es el networking, las zonas comunes pueden ser la mejor opción. Los espacios abiertos son perfectos para aquellos que disfrutan de un ambiente más dinámico, buscan inspiración y establecer relaciones profesionales.
Si bien elegir un espacio adecuado es clave, también es importante saber cuándo desconectar. Por eso, los coworkings cuentan con zonas de descanso, que permiten despejar la mente y mejorar el rendimiento.
Establece una rutina de trabajo
Aunque la flexibilidad es una de las grandes ventajas del coworking, sin una buena organización, esta puede ser un arma de doble filo. Para ser productivo, es fundamental crear una rutina de trabajo. Definir un horario de trabajo te ayudará a establecer límites y mejorar la gestión de tu tiempo.
Utilizar técnicas de productividad como el Método Pomodoro (trabajar en bloques de 25-50 minutos con descansos cortos) o la Matriz de Eisenhower (clasificación de tareas según urgencia e importancia) puede ser clave para mantenerte concentrado.
También, aprovechar los descansos estratégicamente puede ayudarte a ser más productivo. No se trata solo de descansar, sino de optimizar esos minutos para recargar energía. Dar un paseo, tomar un café o socializar con otros coworkers para despejarte hará que vuelvas con más claridad al trabajo.
Usa las herramientas y recursos que ofrece el espacio
Aprovechar al máximo los recursos del coworking, como las salas de reuniones, áreas para videollamadas, internet de alta velocidad y los eventos, puede mejorar tu rendimiento y ampliar tu red de contactos. Conocer bien todos los servicios disponibles te permitirá sacarles el máximo provecho.

Sé parte de la comunidad
La productividad no consiste en trabajar más, sino en trabajar mejor. Rodearte de personas con intereses similares a los tuyos puede ser una de las mayores ventajas del coworking. El networking trata de compartir experiencias, aprender de los demás y encontrar sinergias. Una conversación puede llevar a colaboraciones, oportunidades laborales y nuevas ideas. Asistir a eventos y talleres del coworking también ayuda a mejorar habilidades, hacer contactos y mantenerte motivado.
No te limites a ir, trabajar e irte. Participar activamente en la comunidad te permitirá aprovechar al máximo todo lo que este espacio puede ofrecer.
En WorkInCompany tenemos un entorno pensado para que autónomos, nómadas digitales, freelancers y empresas encuentren esa combinación perfecta entre concentración y oportunidades de networking. Si aún no has probado la experiencia de trabajar en un coworking, ¿a qué esperas?